Ella

Ella ...le amo por encima de los días amargos y de los días dulces, ella le amo como aman las grandes, como aman las grandes mujeres, ella le amó desde el corazón.

 

Quierete.

Te podrán admirar, te podrán valorar e incluso te amaran, pero quererte, lo es que es quererte de verdad, solo tú te lo harás, así que... empieza a quererte ya, que como tú nadie te querra.

?¿¿?

Y de que sirve comunicar, si el otro no quiere escuchar. Empatizar, no es más que un nexo de unión entre oídos, cerebro y corazón. Aprender a escuchar, es uno de los actos de amor más grandes del mundo. Si vas ha quererme, primero has de entenderme, abre tus oídos y escucha, que aquel que escucha está aprendiendo a amar.

Y...

Mirando atrás, veo que no volveré a ser joven y la tristeza se adueña de mí, al ver que mis recuerdos contigo debieron de ser tan simples que no me dejaron huella. Quiero reír y sentir que estoy viva y que mis recuerdos estén grabados a fuego a base de felicidad.

Enamorar

Enamorarse es fácil, quererse en el tiempo es lo que requiere de un amor sincero, que mire mas allá de los cuerpos y que sepa encontrar el sutil equilibrio para querer en libertad.

Cenicienta

Me regalo mi sueño y cuando desperté, cuando desperté él estaba ahí, mirándome como miran los que aman y hablandome con el don de la elocuencia me deseo buenos días. Quizás, el brillo de su mirada no es más que su forma de pedir perdón, perdón por los malos momentos, pero la vida no es más que un cúmulo de experiencias que te curten como ser humano y la vida en pareja es de los gladiadores que lucharon, que lucharon y ganaron cicatrices, cicatrices que son las enseñanzas para el futuro. El me regaló mi sueño y juntos lo hicimos realidad.

Escríbeme con pinceles.

Dibújame entre tus letras, 

acurrúcame entre tus líneas, 

léeme despacio que me encuentres en cada sonido. 

Hazme sentir amada con un suave roce de papel y excita mis sentidos leyéndome al oído. Dibújame en tus letras y encuéntrame en tus textos, léeme al oído y enternece mis sentidos. Léeme despacio para que el sonido de tu voz, escriba mis recuerdos. 

Dibújame entre letras y escribe mis besos en reglones torcidos, para así sacarles el mejor de los partidos.

He me aquí

He me aquí, abatida, sin ganas de levantar ni sonreír, respirando por inercia, muerta en vida. Anhelando ese instante en que tú presencia me despierte los sutiles aromas a ti, esos que me devuelvan la vida. He me aquí, soñando, pues dicen que el mundo es de los que sueñan....pero no, el mundo es de los que tienen el valor de levantar, levantar para hacer sus sueños realidad. He me aquí, sacando fuerzas de flaquezas para irte a buscar y te encontrare, te encontrare donde me hagan sonreír. He me aquí, que hoy desperté abatida, abatida y perdida, sin ganas de soñar...pero en un leve instante te imaginé y levante con ganas de luchar.